viernes, octubre 26, 2018

Anna Pavlova e Isadora Duncan: DIÁLOGOS ( desde México)


Tatiana Zugazagoitia es Isadora Duncan, Carmen  Correa es Ana Pavlova.
Tatiana Zugazagoitia y Carmen Correa 

Una dupla para resaltar. La puesta en escena de la idea  imaginada por Tatiana fue realizada  con maestría por las dos. La  escenografía es de Matteo Montini
Carmen y Tatiana, las dos en sus 50 años, representan a dos bailarinas que fallecieron a esa edad. Pavlova a los 49 e Isadora a los 50. Bailarinas antagónicas y como ellas una clásica y otra contemporánea.
La trama es el encuentro imaginario de las dos divas, ya fallecidas, en la estación de trenes que  las llevarán a su destino final: el paraíso.
Durante el transcurso de la obra ellas se van contando sus vidas, en un juego entretenido donde una rebate  a la otra. Una reflexión compartida que las lleva a verse como entrañables amigas/enemigas  que argumentan sobre la danza, el arte,  el éxito, la vida.
Tatiana Zugazagoitia-foto Obtura

Voz y movimiento. Teatro y danza. Biografía y fantasía de un futuro en donde no saben si serán recordadas y cómo evolucionará la danza ya sin ellas.
Se muestran y se complementan. Imaginan las diferentes formas que tomará la danza y recorren platicando, jugando  y adivinando  las posibles nuevas técnicas y prácticas dancísticas (imaginan moviéndose  con las que  hoy utilizan los bailarines. Situación que hace reír a los conocedores).


Ver a Carmen Correa descalza y a Tatiana haciendo developpe y port de bras unificándose, disfrutando el movimiento,  la danza, y mostrando la pasión que alberga en el alma y en el cuerpo de los bailarines,  independientemente de la técnica que practiquen.
Carmen Correa-foto Ivan Gabaldon

La prestancia y seguridad en los parlamentos,  fue un reto actoral y de dramaturgia,  que lograron como resultado de la asesoría que les  brindaron  Analie Gómez, Roberto D´Amico y Susana Alexander.
El final, aplaudido de pie, contó con la presencia de sus  reconocidas maestras   Nellie Happee, Cora Flores y Farahilda Sevilla, quienes fueron las convocadas a develar la placa conmemorativa de los 35 años de trayectoria de las dos bailarinas.

Que mejor manera de celebrarlo que haciendo esta obra. Hermosa y necesaria al hacer revivir a dos grandes creadoras.
Una manera mágica para aprender la historia de la danza revelando la vida de estas precursoras, mostrándolas como seres reales, humanos, quienes se  convirtieron en mitos gracias a su entrega, creatividad, perseverancia, belleza y resiliencia.  Ejemplos a seguir para las nuevas generaciones de artistas.
Diálogos


Beca del FONCA a Fomento a Proyectos y coinversiones culturales 2018.
Idea original y Dirección Tatiana Zugazagoitia
Creación escénica y dramaturgia Carmen Correa y Tatiana Zugazagoitia
Diseño Sonoro Eduardo Orlando Rivas
Diseño de escenografía  Matteo Montini
Diseño de iluminación Manuel Araiza
Diseño y realización de vestuario Roselia Evans
Asesoría actoral Amalie Gómez, Susana Alexander, Roberto D’Amico
Asistente de dirección  Mayra Lazcano- Pako Kantún
Fotografía Maru Fitzmaurice
Realización de abrigos Lola Rosales
Teatro de la Danza Guillermina Bravo
CDMX México
11, 13, 14 de octubre 2018

jueves, julio 12, 2018

Fluctuantes


Bailar desde adentro, dejando aparecer los porqués y los cómo. Nítidos limpios, cuidadosos y pensando en los otros como parte del todo. El colectivo visto como unidad. Los vemos acoplados, resistentes, acrobáticos, como hermanos que saben reconocerse, sin hesitar, sin pensar si el otro estará allí para  recibirlo. Confían.

Inmersos en una atmósfera amorosa que los sostiene  y los traslada, a través de los cambios del camino.
Un proceso de exploración creativo, doloroso y turgente.  Teniendo como fin reconocerse en el otro, que es a la vez uno mismo.
Son siete, cuatro ellas: Carola Méndez, Javiera Sanhueza, Melisa Maturana, Tatiana Pérez y tres ellos: Exequiel Gómez, Magnus Rasmussen y Nicolás Cottet.
Se desplazan en dúos, tríos y solos con acciones que los hacen aparecer como protagonistas responsables de hacer resaltar a los demás.
Un inteligente uso de la iluminación, los sitúa en cada  momento con sutileza y precisión.
El uso de los dispositivos de iluminación, creados por el diseñador José Palma, y que fueron manipulados por los bailarines, crearon efectos sorprendentes. Unos cilindros con potente luz, una suerte de luz estroboscópica, sin llegar a ser molesta, como estas, corta sutilmente las imágenes al rodar en distintas direcciones.
Un contraluz con cuerpos sigilosos que gatean, como siguiendo el hilo de Ariadna, que los lleva a  la salida, al renacimiento.



El vestuario en color gris plata, es diseño de Tatiana Pimentel.  Diferentes dentro de su similitud, unos mejor logrados que otros.
Este proyecto FONDART 2018, les dio piso para presentar esta creación  en una de las salas del GAM, escenario conquistado para este nuevo proyecto, saliéndose del espacio conocido y ampliando el horizonte    hacia nuevas audiencias.
El resultado de este trabajo escénico  deja el gusto de lo bien hecho, con una buena producción y como ellos señalan “sin un discurso explícito”, y pensado con ganas de mostrarse renacidos en este estreno de invierno, después de la tormenta.
(Mabel Diana)


Colectivo  de Arte La Vitrina 
Intérpretes                      Carola Méndez, Javiera Sanhueza, Melisa Maturana, Tatiana Pérez,
                                         Exequiel Gómez, Magnus Rasmussen y Nicolás Cottet 
Diseño sonoro                Vicente Yañez 
Diseño de iluminación   José Palma 
Productor                       Javier Muñoz
Fotografías                     Camilo Pérez

GAM
Sala B1
28 Jun al 15 Jul 2018

sábado, mayo 05, 2018

En lugar de nada


El Ballet Municipal de Cámara de Valdivia  llega al GAM por la convocatoria 2018. Un escenario que los ha acogido con curiosidad y asombro.
Esta obra creada en 2015, nace a partir del tema del agua, su carga simbólica y emocional. Como dice Joel “en ella, están expuestos valores de origen bastante ritual y ancestral que nos conectan con la vida y la muerte. Hay un valor emocional en el agua y como trabajamos con el cuerpo, considero que las sensaciones viajan a través de nosotros como fluidos que se manifiestan de acuerdo a percepciones que vamos teniendo.
La compañía se luce, se despliega al máximo en una obra hecha para ellos e interpretada con profesionalismo y garra. La coreografía de Joel Inzunza Leal los hace resplandecer. Todos son uno. Se ve el afiatamiento de la compañía.

En las obras contemporáneas el público es también creador. Cada espectador arma su narración.
Pensando en la  vida y la muerte, aparece un tema vigente: el femicidio. Pero en ningún momento aparece la violencia explícita. El cuerpo de ellas es movido, suspendido y sostenido con delicadeza. Como si el agua las moviera. La fuerza de ellos no las veja. Sus miradas son de contemplación y acompañamiento. Es esa muerte no esperada, imprevista.

Los cambio de luz, marcan las escenas y son de una precisión exquisita. Los personajes desaparecen y surgen en lugares no imaginados. El vestuario cambia o se esfuma, dejando torsos desnudos mimetizados en los movimientos. Ellas, desprovistas, semidesnudas, muestran la vulnerabilidad del cuerpo y del alma. Todos se mueven con fuerza y energía. Los cambios de ritmo de sus traslados, dan descanso a la vorágine de sus entrecruzamientos. El espacio es usado con precisión, las entradas y salidas son imperceptibles. Las escenas fluyen y como el agua, en mareas progresivas van llevando y trayendo a los bailarines a puertos imaginarios.
La iluminación está coreografiada, no queda nada desdibujado. La luz es otro intérprete.



Ficha Técnica
Dirección, Coreografía e Iluminación: Joel Inzunza.
Intérpretes: Valentina Kappes, Rodrigo Llancaleo, Poleth Espinoza, Francisco Sepúlveda, Flora Monsalves,  
                      Alluitz Riezu e Ignacio Díaz.
Asistencia Coreográfica: Francine Renner.
Producción General: Ignacio Díaz y Alluitz Riezu.
Música Original: José Tomás Molina y Jorge Grela.
Técnico de Iluminación y Sonido: Francisco Ríos.
Asesoría Estética y Vestuario: Ignacia Peralta.
Fotografía: Fabián Cambero, Josefina Pérez, Sebastián Gatica y Carlos Johnson.
Realizador Audiovisual: Sebastián Gatica.
https://vimeo.com/165679090
Funciones: GAM 26 Abril al 6 Mayo, 2018

El Ballet Municipal de Cámara Valdivia nace el año 1994 bajo el alero de la I. Municipalidad de Valdivia. Su trayectoria y nivel artístico le ha permitido estar presente en los principales escenarios nacionales, cumpliendo una labor de difusión y extensión de la danza regional. Tiene a su haber más de 30 creaciones coreográficas y montajes realizados exclusivamente para la compañía. Directora Ximena Schaaf, y Ricardo Uribe, coreógrafo.

miércoles, abril 25, 2018

Shock “Anatomía del abandono” Por las víctimas inocentes. Obra de Vicky Larraín


Lugar  de las funciones Villa  Grimaldi (*).
Desde la entrada el espacio va definiendo la atmósfera. Se pasa al lado del muro de los nombres de las víctimas desaparecidas. La obra se adueña del lugar.
Una voz en off va recitando esos nombres, como una letanía que acompaña la entrada del público, que dirigido, se  lo lleva al pie de La Torre (*) donde dará comienzo este shock.

La Torre marca el inicio. Una puerta abierta desde donde se atisban seres andrajosos, empolvados, que se mueven lentamente, como si apenas despertaran del horror, como fantasmas pasmados de estar allí.  Son diez. Llenan el espacio. Con sus emociones, con sus gestos, con sus desventuras.
Son las víctimas del abandono. Con su salida el público retrocede hasta la platea del teatro que está a continuación. Un amplio escenario bajo una gran estructura abierta.

Las escenas se van desenvolviendo muy bien definidas, bien distribuidas en el espacio. Con sus ritmos diferentes y a la vez dándole unidad a la obra.
La búsqueda frenética del otro, el desconcierto al encontrarse con algo, o con alguien que puede ser o no ser ese ser tan añorado. Ese tocar el cuerpo que se atraviesa,  tratar de reconocerlo, de sentir si late, si vive, si es.
Vicky Larraín aparece. Su fuerza interpretativa conmueve. Es la madre desolada cargando un hijo quizás muerto, desaparecido o abandonado. Una carga preciosa que destroza.
Natalia Cuellar muestra su control del tiempo. Ese saber estar inmóvil moviéndose lo imprescindible.
Javier Muñoz vive cada gesto, cada movimiento, y no deja que los espectadores lo abandonen.
Francisca de Petris  acongoja con sus gritos desgarradores.
Todos son un conjunto amalgamado, afiatado, entregado de lleno a las manos de la creadora, que los lleva por el camino elegido con destreza y seguridad.

Vicky Larraín tomó como referencias para desarrollar la obra distintos sucesos que han puesto en shock al mundo. Por su brutalidad, por su inhumanidad. La bestialidad de la bomba  en Hiroshima, las torres Gemelas en N.Y., los 43 estudiantes mexicanos asesinados en 2014, los detenidos desaparecidos en Chile y Latinoamérica.
Todos  eventos,  durante los cuales, fue imposible protegerse, resguardarse. Donde lo peor del ser humano produjo el shock del alcance de lo inimaginable en la cotidianidad.

FICHA TÉCNICA
Teatro gestual: “Shock: Anatomía del Abandono”
Dirección: Vicky Larraín
Elenco: Marjorie Ávalos, Natalia Cuéllar, Raimundo Estay, Romina Paz Rojas, Carlos Cortes, Pelusa Trincado, Francisca de Petris, Juan Pablo Iriarte, Kevin Magne, y Javier Muñoz.
Sonido: Collage
Producción: Luis Piñango
Difusión: Gastón Zepeda
Diseño Iluminación:
 Jorge Osorio Peralta 


Funciones abril 2018: Villa Grimaldi, Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, con funciones gratuitas en La Pintana, Los Vilos y Valparaíso.









(*) Villa Grimaldi fue el recinto secreto de detención y tortura más importante de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA) la policía secreta del régimen militar de Augusto Pinochet en Chile entre 1973 y 1977. El local, conocido por los agentes de la  DINA como Cuartel Terranova.
Los primeros detenidos llegaron ya a mediados de 1974. Hacia el verano de 1975, Villa Grimaldi pasó a convertirse en el centro de operaciones de la BIM, que ejercía la función de represión interna en Santiago.
En la actualidad se conoce como Parque por la Paz Villa Grimaldi, fue recuperado y convertido en sitio de memoria y espacio de promoción de los Derechos Humanos, gracias al trabajo de sobrevivientes, organizaciones de Derechos Humanos y la comunidad.
(*)La Torre: en su interior se construyeron celdas de setenta por setenta cm. de largo y dos metros de alto, con una puerta pequeña que obligaba a entrar gateando. La torre disponía de una sala de torturas. A muchos de quienes permanecieron en La torre no se les volvió a ver. 

Bru, o el exilio de la memoria


A pesar de haber perdido la memoria. Mientras alguien nos recuerde existimos.
La memoria nos hace reales. Podemos contar quienes somos y que hemos hecho.
Las biografías cumplen con ese cometido. Recordar.  Recordarnos.
Luis Buñuel en su libro Mi último suspiro dice: “Hay que haber empezado a perder la memoria, aunque sólo sea a retazos, para darse cuenta de que esta memoria es lo que constituye toda nuestra vida. Una vida sin memoria no sería vida, como una inteligencia sin posibilidad de expresar no sería inteligencia.”
Amalá Saint Pierre y Francisco Paco López decidieron rescatar la memoria de Roser Bru. Y utilizan este biodrama para contar a dos voces la historia de Roser. Un diálogo casi al unísono con fondo de El Bolero de Ravel.
Niña, joven, exiliada, inmigrada. Hija, madre y abuela. Siempre artista comprometida con la historia que la acompaña desde su nacimiento.
Barcelona, la República española, el exilio europeo, el exilio chileno. La inmigración y el decidir quedarse aquí.
“Guerra, exilio, desaparecidos. Roser ya vivió demasiadas guerras, demasiados exilios…”
Así lo cuentan  y nos muestran fotos y pinturas que nos pasean por la vida de Roser. La vemos joven, sola y acompañada. Conocemos a sus padres y hasta la maleta con que cruzó montañas y mares.
El relato contiene emoción.  Es imposible quedar inconmovible ante la historia.
Todo el texto nos recuerda a Henry Miller cuando anuncia “El artista está en guerra perpetua con la muerte”.

Esta investigación de teatro documental, ya publicada en un libro, es la primera parte del proyecto que fue  financiado por Fondart 2017. La segunda fase será  la experimentación escénica del texto cuyo resultado final será la puesta en escena de la obra.

Ya la esperamos.